Mordida abierta
Existen diferentes razones por las que se puede producir la mordida abierta, un problema que afecta a la masticación del paciente y que, en caso de no ser corregido por el dentista, también puede derivar en otros problemas bucodentales con el paso del tiempo.
Qué es la mordida abierta
La mordida abierta se produce cuando el paciente, al juntar el maxilar con la mandíbula, presenta una malposición entre los dientes superiores e inferiores.
Básicamente el problema es una maloclusión que impide que las piezas dentales de la arcada superior coincidan con los de la arcada inferior, quedando un hueco entre ellos.
Existen cuatro tipos de mordida abierta que son:
- Mordida abierta anterior: no encajan las piezas dentales de la parte delantera de la boca.
- Mordida abierta posterior: el problema de encaje se localiza en las piezas dentales de la parte posterior de la boca.
- Mordida abierta lateral: no encajan las piezas dentales de uno de los lados de la boca.
- Mordida abierta completa: tan sólo encajan los últimos molares, de manera que el resto de piezas dentales no llegan a tocar entre ellas.
Síntomas principales
Entre los principales síntomas que presenta la mordida abierta destacan:
- Dificultad a la hora de masticar.
- Con el paso del tiempo, es normal que aparezcan problemas digestivos debido a la mala masticación del alimento.
- Dificultad a la hora de respirar.
- Se observa alteración en la pronunciación, siendo más frecuente el seseo.
- Se pueden llegar a desarrollar trastornos de la articulación temporomandibular, derivando en dolor de cuello, dolor en la cara o chasquidos en la mandíbula entre otros.
Qué tratamiento de la mordida abierta es más recomendable
Existen tres tipos de tratamiento para la mordida abierta que en casos importantes deben ser tratadas por un cirujano maxilofacial:
- Ortodoncia interceptiva: su objetivo es el de corregir las masas óseas para que se vayan desarrollando del modo adecuado, algo que tan sólo se puede hacer en los pacientes más jóvenes que todavía están en fase de crecimiento.
- Ortodoncia convencional: a partir de la adolescencia, en el caso de maloclusión leve, se deberá optar por la colocación de una ortodoncia.
- Ortodoncia y cirugía: a partir de la adolescencia y en el caso de maloclusión grave, se deberá realizar una intervención ortognática para adaptar la mandíbula y el maxilar, tras lo cual se procederá a realizar la ortodoncia.